martes, 19 de octubre de 2010

La vuelta del amado.

Querida alma, deja que te responda desde mi corazon, como expiacion y despedida. Hablas de sacrificio.
Pero es un misterio, indivisible, como todo lo demas en el mundo; es la persona propia, la vida propia, la obra propia. Usaste una imagen  que desde hace tiempo tomo posesion de mi alma. Me refiero a la parabola de la polilla y la seductora y fatal llama. Di, si quieres , que yo soy la flama, y que la pobre polilla vuela hacia mi. Pero con el azar y el cambio de las cosas yo soy tambien la vela, ofreciendo mi cuerpo para que la llama pueda arder. Y, finalmente, soy la mariposa ebria que cae en la flama -imagen del sacrificio eterno-, el cuerpo transmutado en alma, la vida en espiritu[...] pero siempre el rostro humano con rasgos de su porpia fase, unidad en cambio y flujo, conversion constante desde y hacia uno mismo, transmutacion de todas las cosas...Muerte , vuelo final hacia la llama- Todo en uno.- ¿Por què no habria de ser tambien algo màs que transformacion?

                                                                                                                                   AMADA, SANATE!